Vivimos un momento en la historia peligrosamente inédito. El crecimiento económico desigual y desproporcionado ha ocasionado una catastrófica corrosión del medio ambiente y una aguda polarización social. Amplios sectores de la población mundial experimentan un desencanto creciente por la democracia y proliferan los líderes populistas, de derecha e izquierda, capaces de destruir las estructuras del Estado de derecho. Ante este complejo panorama, ¿qué soluciones podríamos encontrar en Confucio, un sabio chino de hace más de dos mil años; en Nizam al-Mulk, el visir de un antiguo sultán persa del que nos separan mil años, y, finalmente, en Maquiavelo, el diplomático y filósofo que vivió en Florencia hace quinientos años, en la cúspide del Renacimiento? Cada uno intentó responder a su manera a la pregunta: ¿cómo se gobierna la complejidad?
En este ensayo, Ugo Pipitone realiza un lúcido recorrido de Oriente a Occidente, del pasado remoto al pasado reciente, analizando no sólo el pensamiento político de estas tres figuras emblemáticas, sino también su contexto histórico. Para Confucio, nos dice,la clave de un buen gobierno reside en la ética; para Nizam, el Estado debe ser la manifestación terrenal de los preceptos de unareligión; mientras que Maquiavelo representa el nacimiento de la política como una cuestión plenamente laica, donde la democracia requiere el reconocimiento del conflicto social para no anquilosarse. Cada uno tiene sus luces y sus sombras, sus áreas naturalmente caducas, pero los tres tienen mucho que aportar a este momento que nos demanda, con urgencia, imaginación y responsabilidad colectiva.