La madre Tierra está sufriendo. Y necesita una generación de hijos reflexivos, cuidadosos y activos para protegerla para el futuro. El cambio climático es un problema terrible, y necesita resolverse. Vamos a pagar por nuestros errores en los 50 años. No se trata solo del cambio climático, sino del mero espacio, los lugares para cultivar comida para esta enorme horda. Si no limitamos nuestro crecimiento demográfico, el mundo natural lo hará por nosotros, y la naturaleza ya lo está haciendo ahora.