Este apasionante relato es una de las mayores joyas literarias de Julio Verne, posiblemente el mejor escritor de novelas de aventuras de la historia. El texto fue retocado por su hijo Michel antes de su primera publicación, limando sutilmente la desesperanza que embargaba al autor en esos momentos finales de su vida. En una isla olvidada en el extremo sur de la Patagonia, donde chocan el Pacífico y el Atlántico, hay un faro, que hizo levantar el gobierno argentino, con el fin de evitar que los barcos se estrellasen contra el arrecife. Nos encontramos en una región poblada de piratas sin escrúpulos que saquean a toda navegación varada. De ahí que se construyese el denominado Faro del fin del mundo y se tomasen las medidas necesarias para que los veleros no encallasen en la costa o en las peñas. Sin embargo, los malhechores, comandados por el sanguinario Kongre, y su mano derecha Carcante, se alzarán en rebeldía y aniquilarán a todo aquel que se ponga por delante. ¿Vencerán?